domingo, 24 de julio de 2016

Artur Mas, el zorro superferolítico

Tengo una amiga que con ocasión de narrarme una anécdota de una conocida suya concluyó con un "Es cursi hasta desnuda". Aunque no puedo dar fé de ello si doy crédito a las cosas que me cuenta la aludida amiga.

Va de cursis, por tanto.

Leed este texto queridos mios:

“Era a principios de octubre de 1983 cuando mi mujer, Helena, y yo fuimos padres por primera vez. Hace pocos meses, a principios de año, revivimos aquella experiencia con la llegada de nuestras primeras nietas, dos gemelas preciosas. En algún momento del fin de semana pasado recordé esta mezcla de sensaciones de angustia, ilusión y trascendencia. Esta vez no era una pareja que daba vida a una criatura, sino miles de padres y madres que hacían nacer a un nuevo partido político en Catalunya, el Partit Demòcrata Català. Treinta y tres años después se reproducían las mismas sensaciones: la desazón para que todo fuera bien, la incertidumbre que provoca aquello todavía desconocido, la gran ilusión de ver nacer algo que sientes como tuyo, y el sentimiento de trascendencia que tienes cuando ves que la vida existente engendra y alimenta nuevas vidas”. 

 ¿Habeis adivinado ya el nombre del autor de el remilgado texto? ¡¡Bingo¡¡ Artur "Astucias" Mas, tipo que está "encantado de conocerse" que sonrie con una suficiencia insultante cuando no es más ni menos que un Cerbero comisionado por su amo para evitar que lo "empapelen", a él, a su Santa y a su camada. Para ello era necesario mantener "el poder" a toda costa para poder "negociar" con Madrid. Poco a poco fue perdiendo apoyos para mantener el poder Autonómico y devino independentista. Dado que el defraudador había confesado y buena parte de la ciudadanía que veía en su partido -CDC- el instrumento para mantener el poder le había abandonado y éste, el partido, tenía la sede embargada, procesados buena parte de los "cuadros" etc procedía mutarlo en otro al modo lampedusiano y ¡¡voilá¡¡ el Partit Demócrata Catalá. 

Mas es tan necio que no quiere percatarse de que su supervivencia política y la de su nuevo jueguete pasan por la orilla del rio Manzanares. Cuando quiera darse cuenta, será tarde. Todo un astuto, un zorro,  pero eso si, superferolítico.

No hay comentarios:

Publicar un comentario